Cuernavaca, Morelos.- Andrés Manuel López Obrador, presidente electo de la República, salió a parar las críticas por los lujos de la boda de su ex vocero César Yáñez, ya que solo asistió como invitado a un evento privado y no fue un acto de gobierno.
“No me casé yo, yo fui invitado y asistí, así como cada quien es responsable de sus actos”, manifestó el futuro mandatario, cuando le cuestionaron sobre la boda de su secretario particular celebrada en Puebla.
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En aquel festejo acudieron funcionarios del gobierno electo, senadores, diputados, fundadores de Morena, así como Antonio Gali, gobernador de Puebla y Manuel Velasco, mandatario de Chiapas.
La boda de César Yáñez y Dulce Silva no fue una acción de gobierno, porque fue un evento social y privado al que asistí.
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“Desde luego están cuestionado nuestros adversarios porque andan buscando cualquier posible error para hacernos los crítica”, expresó.
Vamos a seguir actuando con integridad, principios, así como con austeridad republicana, concluyó.
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