Con la mayoría de Morena, el Senado de la República aprobó este jueves la Estrategia Nacional de Seguridad Pública, planteada por el ejecutivo federal para frenar la violencia que impera en gran parte del territorio nacional.
De 112 senadores presentes, 78 votaron a favor, cuatro en contra y se registraron 30 abstenciones.
Las bancadas de oposición en el Senado, PAN, PRI, MC y PRD, se unieron en bloque para rechazar la estrategia bajo el argumento de que carece de claridad en cuanto a las rutas y objetivos para pacificar al país. “Es un documento que le falta mucho y que solo viene a cumplir un requisito de ley y no muestra cifras ni plazos de cumplimiento”, acusó el PAN, pese a que el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que en seis meses disminuiría la violencia.
Es de mencionar que para completar el paquete de seguridad del nuevo gobierno, la Cámara alta prepara un periodo extraordinario de sesiones del 13 al 17 de mayo donde buscarán aprobar las cuatro leyes secundarias de la Guardia Nacional.
Falta claridad, acusa el PAN
En la discusión el senador panista, Julen Rementería criticó la estrategia al catalogarla como solo solo anhelos y concesiones de confianza para el gobierno, “pero no se ha señalado con claridad cómo se va a construir la paz que reclama México”.
Al hacer un análisis de los ocho apartados, el senador dejó ver que en ninguno de ellos se explica cómo será la estrategia para bajan índices de adicciones, flujo de armas, garantizar empleo, educación, y reactivar la procuración de justicia.
Documento no tiene rigor, dice el PRI
“No estamos en contra de esta buena intención de alcanzar la paz lo que no vemos, es que este documento alcance para llamarse una estrategia si lo que venimos a aprobar es una estrategia, cuando tengamos una estrategia en la mano la aprobamos, mientras tanto nos abstenemos de aprobar un documento que no contiene el mínimo rigor”.
En tribuna, Jorge Carlos Ramírez Marín del PRI dijo que no podemos dar nuestro voto aprobatorio a esta estrategia porque solo es un documento declaratorio con análisis político.
El documento no ofrece datos y cifras que permitan conocer cómo entiende el gobierno la violencia que se vive, nos tenemos que atener a las declaraciones con el riesgo de que un día sean unas y otro día otras.
El priísta, dijo que no tendremos forma de saber si la estrategia una vez implementada está funcionando o no, lo que no se puede medir no se puede mejorar.
Por ello destacó que la estrategia nacional de seguridad es un documento incompleto, no aborda ni analiza los temas ni ofrece las soluciones esperadas, se centra en discurso político que por sí solo no ayudará a superar la inseguridad o violencia, los discursos sin diagnósticos solo son posturas políticas y la seguridad no se va a resolver con política.
Miles de carpetas sin investigar, señala Morena
Por su parte, la senadora de Morena, Lucia Virginia Meza Guzmán defendió la estrategia señalando el desastroso antecedente y abandono de la procuración de la justicia desde el 2006, “nos dejaron más de 200 mil carpetas sin investigar”.
Reclamo que el lavado de dinero, tráfico de armas, fuga de capos, los gasolinazos no se podrían llevar a cabo sin el contubernio de funcionarios públicos, eso se tiene que acabar.