CHIHUAHUA. La Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) se encuentra “en crisis”, vive una etapa de marginación y apatía, lo que la ha llevado a perder su fuerza, por lo que dos bloques de gobernadores de oposición se disputan su control y la agenda de interlocución con el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, frente a la pasividad de los mandatarios estatales de Morena, coincidieron politólogos y funcionarios estatales.
Con la aparición de la Alianza Federalista y la Alianza del Bajío, la Conago parece estar en la obsolescencia. Doce gobernadores anunciaron la integración de una mesa de diálogo bajo la idea de crear un federalismo cooperativo que resuelva la coyuntura: la emergencia sanitaria y luego, detonar el desarrollo sustentable con un enfoque regional.
Francisco Domínguez concluye dirigencia de la Conago
Al darlo a conocer informaron que la primera está integrada por los gobernadores de Coahuila, Tamaulipas, Durango, Michoacán, Colima, Chihuahua y Nuevo León, en donde están los mandatarios más activos, los que reclamaron al gobierno federal las medidas de emergencia en medio de la crisis de la epidemia por Covid-19.
La Alianza del Bajío es el otro grupo, integrada por los gobernadores de San Luis Potosí, Querétaro, Guanajuato, Jalisco y Aguascalientes, quienes en medio de la epidemia plantearon una agenda más de tipo económico frente a la reapertura y la instalación de semáforos.
La Asociación de Gobernadores del PAN (GoAN), integrado por Aguascalientes, Querétaro, Yucatán, Tamaulipas, Chihuahua, Baja California Sur, Quintana Roo y Durango, se presentan como una fuerza que de forma paralela plantea una agenta más partidista y nutre los bloques anteriores.
En la reunión de Dolores Hidalgo, Guanajuato, el 16 de junio se pronunciaron por “la libertad para gobernar desde lo local, con soberanía política y suficiencia económica, mediante un nuevo pacto fiscal en el que los estados cuenten con los recursos que en justicia nos corresponden y no sólo mediante la actual fórmula de la ley de coordinación fiscal, a todas luces vetusta, inequitativa e injusta”.
Para el gobernador de Chihuahua, Javier Corral, la Conago “es una entelequia” que la fue matando el Ramo 23 y expuso que “es necesario contar con una nueva asociación de gobernadores de diferentes partidos” porque está muy desfasada o más bien ya no está cumpliendo su función esencial”.
“Los dos bloques de gobernadores coincidieron en la importancia de avanzar hacia un nuevo federalismo cooperativo y responsable, pues sólo mediante la suma de esfuerzos y la corresponsabilidad será posible, primero resolver los graves desafíos derivados de la emergencia sanitaria y, después, detonar el desarrollo sustentable con un enfoque regional”, señalaron las alianzas reunidas de forma virtual el pasado viernes.
En su pronunciamiento hablan de ser propositivos, de “colaborar con la federación con el fin de renovar el federalismo mexicano, más justo y equitativo, que permita a los estados del país salir adelante y contribuir al fortalecimiento de la vida nacional”.
Para el autor de Los sentimientos de la región, Carlos Martinez Assad, la Conago “entro en crisis” desde que perdió de vista que su objetivo que era “tener un frente ante el gobierno federal y quien lo encabeza y perdió de vista la defensa de las entidades frente a un federalismo impositivo y centralista”.
El jueves pasado el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles criticó el “tortuguismo y apatía” en la forma en que trabaja la Conago para cumplir sus acuerdos.
“Una muestra de este incumplimiento es la rotación en tiempo de la presidencia de la Conago. Por eso, invito a los gobernadores saliente y entrante, Carlos Mendoza Davis (BCS) y Juan Manuel Carreras (SLP), a que convoquen cuanto antes a la reunión plenaria que se requiere para el relevo”, expresó.
Pero en la reunión virtual del 26 de junio que sostuvieron con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, para definir los semáforos sanitarios, los gobernadores le solicitaron la agenda de temas del presidente López Obrador para el próximo semestre, a fin de convocar a la sesión plenaria en la que se realizará la sucesión en la presidencia que quedaría a cargo del gobernador Carreras, quien fue electo como sucesor.
De forma paralela a eso hay quienes desde los gobiernos estatales señalan que otro factor de inmovilidad inicia en la secretaría técnica de la Conago, a cargo de Rolando García, quien “se ha eternizado en el cargo al acumular 17 años en esa función”.
En el grupo de los morenistas, la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, se convirtió en quien tiene el liderazgo. “Ella es a la que se ve con una posición más estatista con contraste con el resto de los gobernadores de Morena”, a los que se ve más ausentes, afirma el investigador Carlos Martínez Assad, del Instituto de Investigaciones Sociales.
Para Ulises Corona Ramírez, profesor-investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México, “la Conago perdió su esencia y no sé si tenga oportunidad de transformarse, dependerá del liderazgo de los gobernadores”