Con altibajos, el último gobierno perredista en la Ciudad de México presenta hoy su Informe de Gobierno. Entre los hechos relevantes que marcaron esta administración se encuentran la aprobación de la primera Constitución local, en febrero de 2017, y el terremoto del 19 de septiembre del mismo año, cuyas secuelas aún padecen los damnificados.
Esta gestión la encabezó Miguel Ángel Mancera (diciembre de 2012), hoy senador de la República y fallido precandidato presidencial; quedó en su lugar José Ramón Amieva, quien asumió el cargo en abril de este año.
De los sucesos negativos registrados en los últimos seis años destacan el cierre de la Línea 12 del Metro; el aumento a la tarifa del Sistema de Transporte Colectivo de tres a cinco pesos (generándose protestas); la decisión de ampliar el Hoy No Circula a vehículos de modelo antiguo; la presencia creciente del narcomenudeo con Felipe de Jesús Pérez El Ojos en Tláhuac, y el poderío que adquirió La Unión Tepito; y la desaparición de 12 jóvenes de ese barrio en el bar Heaven, un after hour de la Zona Rosa, cuyos cadáveres fueron localizados en agosto de 2013 en un predio del Estado de México.
CARTA MAGNA
La primera Constitución de la Ciudad de México, que fue aprobada el 31 de enero de 2017, consta de 71 artículos, 40 transitorios, y entre sus aspectos relevantes están el uso médico de la mariguana y sus derivados; la transformación de las delegaciones actuales en alcaldías con un titular y un cabildo; la transformación del Distrito Federal en una entidad denominada Ciudad de México; y el cambio de Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) a la primera Cámara de Diputados local.
SISMO
A las pocas horas de efectuar el megasimulacro para recordar el terremoto del 19 de septiembre de 1985, un sismo, cuya intensidad fue de 7.1 en la Escala de Richter, sacudió nuevamente al país y la Ciudad de México, con un saldo de 228 muertos en la capital.
Ante la tragedia, el gobierno de Miguel Ángel Mancera, quien dejó el cargo en marzo de este año, promulgó una ley de reconstrucción, aprobada por la también feneciente ALDF en noviembre del año pasado.
José Ramón Amieva, exsecretario de Desarrollo Social, asumió el cargo el 17 de abril y sus esfuerzos por asignar los primeros recursos para iniciar la reconstrucción se estrellaron con la desidia de los asambleístas, quienes dejarán al primer Congreso de la ciudad aprobar cambios al presupuesto para reorientar los recursos principalmente a la reedificación de la vivienda.
LO ROJO DE UN SEXENIO
Uno de los casos criminales más relevantes que enfrentó la gestión mancerista fue el asesinato de 12 jóvenes de Tepito, quienes fueron sacados por la fuerza del bar Heaven, un after hour ubicado en la calle Lancaster, número 27, de la Zona Rosa.
El móvil del homicidio múltiple fue una venganza entre bandas de rivales de narcomenudistas, la Unión Insurgentes y la Unión Tepito, cuyos integrantes masacraron a los secuestrados en el Rancho La Mesa, ubicado en Tlalmanalco, Estado de México, donde también fueron enterrados los cadáveres.
Otro hecho criminal relevante fue el ascenso y la caída de Felipe de Jesús Pérez El Ojos, en Tláhuac, en la que forjó una banda de narcomenudeo poderosa hasta que efectivos de la Armada de México lo mataron el jueves 20 de julio del año pasado.
Rigoberto Salgado, entonces jefe delegacional de Tláhuac, fue señalado como presunto cómplice de dicho criminal, pero la solicitud de desafuero interpuesta por perredistas ante la ALDF no prosperó y ahora ya es diputado local.
Finalmente, el crecimiento de la actividad de la Unión Tepito en los últimos meses con su estela de asesinatos y descuartizados en diferentes rumbos de la ciudad cierra la gestión de este gobierno, y, aunque su líder Roberto Moyado, El Betito, fue capturado, la organización de narcomenudistas está en pleno reacomodo.