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PUEBLA. El gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, falleció ayer tras enfrentar una serie de complicaciones en su salud. Es el segundo mandatario poblano que muere durante su encargo, luego de Martha Erika Alonso, su antecesora, perdió la vida en un accidente de helicóptero el 24 de diciembre de 2018, apenas unos días después de asumir el cargo.
La titular de la Secretaría de Gobierno de Puebla, Ana Lucía Hill Mayoral, asumió como encargada de despacho de la gubernatura hasta por 30 días, en tanto el Congreso del Estado elige a un gobernador sustituto que concluya la actual administración en 2024.
Barbosa Huerta falleció en un hospital de la Ciudad de México luego de ser trasladado en helicóptero desde el Hospital de Traumatología y Ortopedia de la capital poblana, en donde fue internado de emergencia durante la mañana de ayer. Tenía 63 años de edad.
Cerca del mediodía el Gobierno del estado emitió un comunicado en el que reportaba la salud del mandatario como estable; sin embargo, a las tres y media de la tarde, el presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó su muerte a través de su cuenta de Twitter.
“Lamento mucho el fallecimiento de mi compañero Miguel Barbosa Huerta, gobernador del estado de Puebla. Acabo de hablar con su esposa Rosario, le expresé mi tristeza y hago extensivo mi más profundo pésame a familiares, amigos y a su pueblo”, apuntó con pesadumbre el jefe del Ejecutivo federal.
Más tarde, Verónica Vélez Macuil, vocera del Gobierno estatal, también confirmó el fallecimiento durante un encuentro con medios de comunicación al que acudiría el mandatario.
“Lamentablemente tendré que confirmarles que hace unos momentos, el gobernador Miguel Barbosa Huerta ha perdido la vida. Tuvo una afección, como lo dio a conocer antier y, bueno, pedimos mucho respeto a la familia en este momento”, expuso, con la voz entrecortada y con lágrimas en los ojos, Vélez Macuil.
Pasadas las 5 de la tarde, el Pleno del Congreso local fue convocado a una sesión extraordinaria en la cual se nombró a la secretaria de Gobierno, Ana Lucía Hill Mayoral, como encargada de despacho de la gubernatura.
De acuerdo con el artículo 77 de la Constitución del Estado de Puebla, la persona a cargo de la política interior de la entidad debe asumir, ante la ausencia del gobernador, esa posición por un periodo no mayor a 30 días.
Ese estatuto también ordena que antes de cumplir ese plazo el Poder Legislativo debe designar un mandatario o mandataria interina y éste será elegido con los votos de las dos terceras partes del Pleno.
Los restos del gobernador fueron trasladados a la capital poblana donde recibirá hoy varios homenajes de cuerpo presente.
El primero, a las 9 de la mañana en el Congreso del estado; a las 9:45 en las oficinas del Poder Judicial, y a las 11 en Casa Aguayo, sede del gobierno de Puebla. De acuerdo con la Coordinación de Comunicación y Agenda Digital del gobierno estatal, el Presidente acudirá a este último.
Al cierre de la edición aún no se daba a conocer la causa de la muerte de Miguel Barbosa, quien fue el sexto mandatario de Puebla en la última década.
Barbosa fue elegido al cargo en una elección extraordinaria en 2019, tras el fallecimiento de Martha Erika Alonso en un accidente de helicóptero en diciembre de 2018, año en que fue elegida.
Luego de la muerte de la gobernadora, Jesús Rodríguez Almeida fungió como encargado de despacho hasta que el Congreso eligió a Guillermo Pacheco Pulido como gobernador interino.
Previo a la elección de Martha Erika Alonso, Antonio Gali Fayad gobernó Puebla durante dos años debido a que durante la administración previa de Rafael MorenoValle se modificó el calendario electoral para que los comicios a la gubernatura empataran con los de la Presidencia de la República.
Moreno Valle era esposo de Martha Erika Alonso y murió con ella en el accidente del 24 de diciembre de 2018.
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Miguel Barbosa compitió en 2018 por la gubernatura contra Martha Erika Alonso, pero perdió las elecciones, por lo que denunció haber sido víctima de un fraude electoral que se consumó con la supuesta quema de papeletas electorales y actos violentos que se suscitaron en diversos puntos del estado. En su momento acusó a Alonso Hidalgo de ser la responsable de orquestar la brutalidad en las urnas.
Tras la muerte de la panista, Barbosa Huerta aseguró que fue “justicia divina” por robarle la elección.
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