A casi un año de la Presidencia de Donald Trump en Estados Unidos, el panorama en los aspectos de migración no es positivo. Si bien se observó una disminución en las deportaciones de Estados Unidos a México y una reducción de 17% de arrestos en la frontera norte, también hay 100 mil niños separados de sus padres. En contraste, las deportaciones de mexicanos tierra adentro de EU aumentó 40%.

De acuerdo con Eunice Rendón Cárdenas, doctora en Políticas Públicas por el Instituto de Estudios Públicos de París, la disminución de los arrestos se debe también a que hay 60% menos intentos de entradas a los Estados Unidos. El discurso xenófobo ha permeado. Mientras disminuyeron 15% las deportaciones a México, aumentaron en un 110% las deportaciones de México a Centroamérica.

“Entonces nosotros, de alguna forma frenamos la frontera sur y esto significa que haya menos gente intentando entrar a los Estados Unidos”, afirma Rendón Cárdenas.

En entrevista con El Sol de México, sostiene que aunque hayan disminuido las deportaciones, aumentó un 40% el número de deportados tierra adentro. Con el presidente Obama, el 80% de las deportaciones eran personas detenidas en la misma frontera y eran deportados.

“Hoy vemos que aunque el número total de deportados es menor, hay un 15% más de gente que no eran migrantes fronterizos, sino de tierra adentro, que tenía más tiempo de vivir allá,  con matrimonio, una familia, más lazos de todo tipo. Esto cambia el perfil del deportado”, afirma la especialista.

También hay un aumento del 43% en los arrestos de tierra. Se triplicó el número de gente sin ningún delito, que es detenida.

“Con Obama veíamos gente deportada y arrestada por delitos menores: pasarse un alto, no tener licencia para conducir, falsificar el número de seguridad social. Hoy vemos que se triplica el número de gente arrestada solo por ser indocumentados, que no han cometido ningún delito, ningún récord criminal, ni siquiera pasarse un alto”, expresa.

Experta en Migración y Prevención de la Violencia y el Delito, la doctora Rendón, comenta: Esto es grave porque están criminalizando a nuestra gente solo por ser migrante y ser indocumentado.

Esto es un perfil racial por parte de la policía, del ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas. Agencia del Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos) y  que detienen gente en lugares donde normalmente no lo hacían: iglesias, escuelas, hospitales.

Asume que al gobierno de México le ha faltado ser más preventivo. “Nos debemos preparar mejor, aumentar la defensa legal allá en todos los casos de arresto. Sí, ha faltado tener mucho más fuerza en el mensaje”. De acuerdo al reporte de Human Rights Watch (HRW) además del cambio de perfil de los detenidos, comentó, “vemos ahora que hay separación y desarraigo, esto es: menores abandonados que los mandan a hogares sustitutos pero que no necesariamente son hogares en los que ellos se sienten bien, porque casi siempre son hogares americanos”.

¿Sabemos cuántos niños están abandonados, en esta condición?

Hay alrededor de 200 mil deportados y 70% con problemas de desarraigo o separación familiar. Pongamos que son más de 100 mil.

Recordó el caso muy emblemático, pero que no es el único, de la niña menor de 10 años con parálisis cerebral, detenida por el ICE y enviada a un Centro de Reclusión de Menores después de una operación de vesícula en Corpus Christi.

AUMENTARON CRÍMENES DE ODIO

El extitular del Instituto de los Mexicanos en el Exterior, señala: “Me parece que también hay una diferencia en el tono del discurso que logró permear en algunos que tienen estas ideas racistas y xenófobas: aumentaron en un 15% los crímenes de odio”.

¿Cuál es el panorama?

El panorama no es para nada alentador. Muchos de los arrestos van a ser deportaciones. Por eso no han aumentado los números, porque tardan tiempo en resolver sus casos en las Cortes Migratorias. Con Obama teníamos 560 mil casos pendientes.