El paso del huracán Otis dejó a decenas de autobuses varados en la zona de la central de Chilpancingo, Guerrero, por lo que ahora se ven sin posibilidades de viajar hacia Acapulco y Costa Grande.
Las autoridades han informado que de manera preliminar la Autopista del Sol permanece cerrada debido a los derrumbes y deslaves de tierra.
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Mientras que en la carretera federal México-Acapulco, a la altura de la localidad de Plan de Lima, en el municipio de Tierra Colorada, se encontraba cerrada la circulación por el desbordamiento de un río.
Los autobuses varados se dirigirían a Acapulco, Zihuatanejo, Atoyac y Tecpan, todos ubicados en la Costa Grande de la entidad.
A los usuarios se les informa en las ventanillas que no hay salidas a esos destinos, y se les dice que éstas se reanudarán hasta nuevo aviso.
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Durante la madrugada, se registró una fuerte lluvia en varias partes de la entidad, debido al ingreso del fenómeno meteorológico.