La Secretaría de Gobernación (Segob) alertó que prevé una oleada de personas que llegarán a México para solicitar la protección internacional en la medida en que la pandemia por coronavirus vaya cediendo, por lo que se habrá de fortalecer a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar).
En el marco de la conmemoración del 40 aniversario de la confirmación de la Comar, el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Alejandro Encinas Rodríguez, recordó que en el 2013, la Comisión registró mil 296 personas como solicitantes de refugio, una cifra que llegó a 29 mil 600 personas en el 2018 y que al cierre del año 2019 rebasó las 70 mil 600 personas solicitantes de refugio en nuestro país, “cifra que siguió creciendo, particularmente en el primer trimestre de este año, donde tuvimos un crecimiento del 34 por ciento respecto al trimestre anterior, con lo cual tenemos más de 80 mil solicitantes de refugio en estos momentos, ante la emergencia sanitaria producida por la pandemia del coronavirus”.
“Se ha detenido este nivel de crecimiento, lo cierto es que el augurio, la estimación que tenemos, es que en la medida que la pandemia vaya cediendo, el número de personas en búsqueda de protección internacional en México habrá de dispararse de manera significativa, para lo cual Comar se está preparando. Esta oleada de solicitantes de refugio que estamos estimando particularmente al inicio del próximo año”, dijo el funcionario.
En tanto, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, comentó que es urgente erradicar la discriminación hacia las personas refugiadas, ya que no basta con ofrecer asilo a quienes dejan atrás su país, sino que es necesario garantizar que sus derechos sean cumplidos a cabalidad para que puedan tener una vida digna.
“Por eso debemos trabajar para erradicar, de una vez por todas, la discriminación con la que todavía se trata a las personas refugiadas. Debemos trabajar por un Estado mexicano que abrigue bajo su manto a todas las personas que necesiten refugio y protección”, externó.
Sánchez Cordero enfatizó que ofrecer asilo a extranjeros cuya seguridad y derechos humanos se ven amenazados, representa una oportunidad para integrar “nuevas capas” a la identidad mexicana”, ya que “en las bases mismas de su fundación destaca por ser plural, incluyente, diversa, heterogénea”.
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