El aspirante a la candidatura presidencial demócrata Beto O'Rourke visitó este domingo Ciudad Juárez para reunirse con los demandantes de asilo cuyo acceso a Estados Unidos fue denegado, en lo que supone el primer viaje de un precandidato a México.
"En todo el debate en torno a la inmigración, no podemos olvidarnos de quienes son los más afectados: la gente que viaja miles de millas, escapando de la peor violencia y opresión", señaló O'Rourke en un comunicado enviado por su campaña.
El excongresista por Texas subrayó que "devolver refugiados, familias y demandantes de asilo no es lo que somos como país" pero agregó que "es lo que será mientras Donald Trump sea presidente"
O'Rourke, de 46 años y quien compitió sin éxito por un escaño para el Senado federal el año pasado, calificó las políticas de Trump como "crueles e inhumanas".
Posteriormente, celebrará un mitin frente a centro de detención de la Patrulla Fronteriza en Clint (Texas), donde abogados han denunciado que los migrantes carecen de acceso a elementos básicos de higiene como cepillos de dientes o jabón para lavarse.
El excongresista, nacido en El Paso (Texas), representó como legislador de la Cámara de Representantes un distrito fronterizo y ha insistido en los beneficios de los inmigrantes para la economía del país.
La cuestión migratoria se ha convertido en uno de los principales temas de la campaña electoral tras las agresivas políticas puestas en práctica por el actual mandatario con amenazas de redadas a inmigrantes indocumentados en todo el país y las malas condiciones en los centros de acogida fronterizos.
Al término del primer debate televisivo de esta semana en Miami, O'Rourke ya visitó un centro de acogida de menores inmigrantes en Homestead, en Florida, junto con otros aspirantes demócratas.