NUEVA YORK. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se embarcó en una serie de actos de recaudación de fondos en dos estados, en un intento de acabar con la crisis de confianza en su campaña de reelección tras una floja actuación en el debate que consternó a sus compañeros demócratas.
Los eventos se desarrollan mientras muchos nerviosos donantes demócratas lamentan el débil desempeño de Biden contra su rival republicano Donald Trump el jueves y se preguntan qué podrían hacer, si es que podrían hacer algo, para cambiar el curso de la carrera, según entrevistas con más de una docena de recaudadores de fondos demócratas.
Biden y la primera dama, Jill Biden, visitaron el exclusivo enclave playero neoyorquino de los Hamptons para un acto de recaudación de fondos organizado por el multimillonario de fondos de cobertura Barry Rosentein. Más tarde, Biden viajó a Nueva Jersey para una recaudación de fondos organizada por el adinerado gobernador demócrata de Nueva Jersey, Phil Murphy.
“Entiendo la preocupación por el debate. No tuve una gran noche”, dijo Biden en la sala con unos 100 seguidores reunidos en los Hamptons. “El punto es que no tuve una gran noche, pero tampoco Trump”.
Y añadió: “Les prometo que vamos a ganar estas elecciones”.
Otro fundador de fondos de cobertura, Eric Mindich, y su esposa Stacey, productora y ganadora de un premio Tony, la pareja de famosos Sarah Jessica Parker y Matthew Broderick, y el actor Michael J. Fox figuraban como miembros del comité anfitrión del acto de Nueva York.
Los donantes juegan un papel crucial, ya que las campañas suelen invertir millones de dólares en anuncios en televisión y personal desplegado por todo el país, especialmente en estados clave.
Dado su peso, los donantes demócratas, junto con Biden, son los únicos que podrían poner fin a su candidatura si decidieran retirar su apoyo económico.
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Ante las crecientes especulaciones por una posible pérdida de apoyo, el equipo de Biden ha intentado demostrar que mantiene un sólido respaldo financiero.
Según datos facilitados ayer, la campaña recaudó 27 millones de dólares a partir del jueves cuando se celebró el debate.