La guerra de descalificaciones mutuas entre el presidente de EU, Donald Trump, y el senador Bob Corker dominó hoy el ambiente previo y posterior al almuerzo que los republicanos celebraron en el Capitolio para abordar el plan fiscal del mandatario.
Los dos, Trump y Corker, asistieron al almuerzo a puerta cerrada y se fueron sin hacer declaraciones a los periodistas tras la guerra dialéctica que iniciaron a primera hora del día.
Enfrentados desde hace tiempo, hoy Corker aconsejó a Trump mantenerse al margen de la elaboración del plan fiscal y dejarlo en manos de "los profesionales", una sugerencia a la que el mandatario respondió con insultos al senador republicano en su cuenta de Twitter.
Corker, actual presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, no se quedó callado tras los insultos y cuestionó la capacidad de Trump para gobernar, además de acusar al presidente de "degradar" a EU.
La expectación antes del almuerzo en el Capitolio era tal que uno de los asistentes, el senador republicano Thom Tillis, se dejó ver ante los periodistas con una bolsa de palomitas en la mano y bromeó acerca de que eran para presenciar el enfrentamiento entre Trump y Corker.
Tras el almuerzo, varios de los senadores comparecieron ante la prensa para subrayar la unidad republicana en torno al plan fiscal de Trump.
"Estamos en la misma página", subrayó el líder de los republicanos en el Senado, Mitch McConnell, sin querer entrar a comentar las críticas de Corker a Trump y argumentando que, gracias a la primera enmienda de la Constitución de EU, todo el mundo puede expresar libremente lo que piensa.
Fuentes legislativas citadas por la cadena CNN sostuvieron que las tensiones entre Trump y Corker no se abordaron durante el almuerzo.
Corker, senador republicano por Tennessee, se ha mostrado abiertamente crítico con Trump desde hace semanas, pero particularmente desde su reciente decisión de no optar a ser reelegido en los comicios legislativos del próximo año.
"Me gustaría verlo a él (Trump) dejar esto (la reforma fiscal) a los profesionales por un tiempo y ver si podemos hacer algo que sea constructivo", declaró hoy Corker en una entrevista con la cadena ABC.
Trump respondió de inmediato en su cuenta de Twitter y reiteró el argumento que ya dio en su día, falso según Corker, acerca de que el senador no va a buscar la reelección porque él rehusó apoyarlo.
El mandatario llamó "don nadie" a Corker, afirmó que es la "cabeza incompetente" del Comité de Exteriores del Senado, que "no tiene ni idea" y, por eso, "el mundo entero ha estado riéndose y aprovechándose" de Estados Unidos.
Corker no se quedó callado y primero en Twitter dijo de Trump que es un "presidente totalmente mentiroso", al pedir "alertar" al personal de la "guardería" en la que, a su juicio, se ha convertido la Casa Blanca con la llegada del magnate.
Después, en un tono más serio durante una entrevista con CNN en los pasillos del Capitolio, Corker comentó que Trump tiene "una gran dificultad con (decir) la verdad" y anotó que "de ninguna manera" lo apoyaría nuevamente si busca ser reelegido para la Presidencia.
Trump "ha demostrado ser incapaz de estar a la altura de las circunstancias" y, cuando termine su mandato, se le recordará sobre todo por la "constante falta de veracidad" y la "degradación de nuestra nación", declaró el senador.
A comienzos de este mes, Corker advirtió en una entrevista con The New York Times de que Trump está "encaminando" a Estados Unidos hacia "la III Guerra Mundial", principalmente por su actitud ante las amenazas nucleares de Corea del Norte.
/eds