El presidente de la Cámara de Representantes, el republicano de Wisconsin Paul Ryan, apeló hoy al presidente Donald Trump a cancelar su plan de imponer aranceles al acero y aluminio, y advirtió sobre los riesgos de una guerra comercial.
“Estamos extremadamente preocupado sobre las consecuencias de una guerra comercial y estamos instando a la Casa Blanca a no continuar con su plan”, señaló en una declaración Ashlee Strong, la portavoz del líder cameral.
“La nueva reforma fiscal ha energizado la economía y ciertamente no debemos poner en riesgo tales ganancias”, subrayó.
La oposición de Ryan al plan de Trump de imponer aranceles de 25 por ciento al al acero y 10 por ciento al aluminio, se ha hecho extensiva a otros republicanos prominentes, incluido el presidente del comité de Medios y procedimientos de la Cámara Baja y del Comité de finanzas del Senado.
Tradicionalmente los legisladores republicanos han apoyado políticas de libre mercado y apertura comercial. En su momento fueron claves para la aprobación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) durante la presidencia de Bill Clinton.
Trump descartó este lunes la posibilidad de una guerra comercial y evitó retractarse de la posibilidad de anunciar las sanciones comerciales, por lo que los republicanos alistan una carta que enviarán a Trump para expresarle sus preocupaciones en el tema, según la publicación de The Hill.
Una vocera del poderoso Comité de Medios y Procedimientos indicó que cualquier acción de la Casa Blanca debe ser limitada y enfocada contra productos específicos y no a nivel generalizado.
El republicano Kevin Brady, presidente del Comité, pidió el fin de semana a la administración exentar de los aranceles a dos de sus principales socios comerciales, Canadá y México.
Trump respondió sin embargo esta mañana que Canadá y México sólo podrán evitar los aranceles si logran completar la renegociación de un TLCAN justo.
El secretario mexicano de Economía, Ildefonso Guajardo, sostuvo esta mañana que México no debe ser incluido en los aranceles al acero y al aluminio. “Es la manera equivocada de incentivar la creación de un TLCAN moderno”, escribió en Twitter.
El Departamento de Comercio (DOC) recomendó a Trump imponer aranceles a las importaciones de acero y aluminio, bajo el argumento de que su incremento “amenaza desquiciar la seguridad nacional” de Estados Unidos.
El DOC propuso imponer un arancel global de 24 por ciento a las todas las importaciones de acero de todo el mundo o imponer un arancel de 53 por ciento a Brasil, China, Corea, Costa Rica, Egipto, India, Malasia, Rusia, Sudáfrica, Tailandia, Turquía y Vietnam, o una cuota equivalente al 63 por ciento de sus exportaciones a Estados Unidos en 2017.
En el caso del aluminio, el DOC planteó un arancel de 7.7 por ciento a las importaciones de todo el mundo, o un arancel de 23.6 por ciento a todos los productos de China, Hong Kong, Rusia, Venezuela y Vietnam, o una cuota a todos los países del mundo equivalente al 86.7 por ciento de sus exportaciones a Estados Unidos en 2017.
Trump, quien debe tomar una decisión final para el 11 de abril próximo en el caso del acero y para el 19 de abril en el caso del aluminio, tiene la opción de modificar las recomendaciones o ignorarlas por completo.