Menos de un minuto le tomó a un grupo de presuntos delincuentes robar mercancía de un negocio de tecnología en Chiautempan, sus rostros y forma de operar ya son difundidos en redes sociales para alertar a los dueños de comercios sobre este grupo y no sumar más víctimas.
De acuerdo con las imágenes de la cámara de seguridad del propio comercio, el pasado 13 de julio a las 12:21 horas, una pareja (hombre y mujer) ingresó al comercio dedicado a la venta de celulares, fundas, bocinas, multifuncionales y accesorios, para solicitar información sobre una mica.
En el video se aprecia la forma de operar de los amantes de lo ajeno, quienes distraen al vendedor para que otros integrantes de la banda extrajeran la mercancía más cercana a la puerta, de acuerdo con los afectados, diversos negocios han sido víctimas.
El video cuenta con audio y es posible escuchar a los presuntos clientes preguntar al vendedor sobre una “mica” para su celular, le cuestionan diversos detalles sobre el producto, pero permanecen juntos para disminuir la visibilidad del dependiente que permanece detrás de un mostrador.
Segundos después ingresa otro hombre con un celular en mano, quien se detiene en un punto estratégico para tapar más visibilidad del vendedor, también lo distrae con preguntas sobre una funda para su equipo de telefonía.
A las 12:22 minutos ingresa otra mujer al establecimiento, quien será la encargada de extraer la mercancía. La mujer manipula los artículos expuestos cerca a la entrada, que son unas bocinas inteligentes, pero le llama la atención una que mide alrededor de 80 centímetros de altura, la baja de un pequeño anaquel y la acerca a la puerta del comercio.
Para ello, otra mujer ya se encontraba en la entrada del establecimiento, cuando se percata que la bocina está cerca de la salida saca una bolsa negra que llevaba entre su ropa y en un rápido movimiento logra meter la bocina a la bolsa, pese al gran tamaño y peso del artículo de audio.
En las imágenes se aprecia a otra mujer, pero sólo observa y retrocede presuntamente para ayudar a la primera para huir con la mercancía robada. Incluso, la mujer del interior, quien fue la encargada de mover el producto, también sale del comercio.
Al percatarse de esto, la pareja inicial que llegó a distraer al vendedor toma su teléfono celular y todavía agradece por la amabilidad al dependiente, inmediatamente después se retiran sin comprar ni gastar un peso; mientras que el segundo “cliente” permanece unos segundos más para solicitar su funda y dar tiempo a sus cómplices de huir con lo robado; finalmente se retira del lugar y concluye la grabación.