La pronta reacción e intervención del Grupo de Búsqueda de Personas Desaparecidas de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), en colaboración con la Fiscalía General del Estado de Puebla, permitió localizar a una menor de edad reportada como desaparecida en el municipio de San Pablo del Monte.
Los hechos se registraron cuando la abuela de la menor se presentó en las instalaciones de la PGJE para interponer una denuncia por hechos probablemente constitutivos de delito, debido a que su nieta de un año y dos meses de edad se encontraban desaparecida.
De inmediato, oficiales de la Policía de Investigación adscritos al Grupo de Búsqueda de Personas Desparecidas iniciaron las indagatorias para dar con el paradero de la menor, al tiempo que el 9 de julio se activó la Alerta Amber estatal y un día después la Alerta Amber nacional.
Dicha acción generó resultados inmediatos derivados de la difusión, ya que el 11 de julio, policías municipales de Puebla recibieron una llamada de emergencia en la que reportaron que en la Plaza del Jazmín, edificio D 10, sobre las calles 61 Oriente y 42 Sur, de la capital poblana se localizó a una menor de edad abandonada.
Por estos hechos, los uniformados se trasladaron a dicha dirección y tras realizar las diligencias correspondientes se percataron que los rasgos físicos coincidían con el registro de la bebé desaparecida en Tlaxcala.
De esta manera y a través de la colaboración con la Fiscalía de Personas Desaparecidas de la entidad poblana, la menor fue presentada ante el representante social de aquella entidad; asimismo, se solicitó la participación del Agente del Ministerio Público de la Unidad de Investigación Especializada de los Delitos de Desaparición Forzada de Personas y Desaparición cometida por particulares de la PGJE de Tlaxcala para integrar datos a la Carpeta de Investigación y continuar con las diligencias correspondientes.
Al mismo tiempo ante la autoridad de Puebla, se presentó la abuela materna de la menor de edad, quien a través del entroncamiento familiar y tras acreditar el acta de nacimiento se confirmó el parentesco consanguíneo, por lo que la bebé fue entregada a su abuela.
TRABAJO COORDINADO
El rescate fue posible gracias a la colaboración entre el Grupo de Búsqueda de Personas Desaparecidas de la PGJE y Fiscalía de Puebla