Trágica muerte encontró un menor de edad al caer a una cisterna ubicada en calle Barranca Escondida, de la colonia Santa Elena, del barrio de San Bartolomé, municipio de San Pablo del Monte.
Ismael N. reportó al 911 la desaparición de su hijo antes de la medianoche del viernes. Después de buscarlo entre barrancos del lugar, no aparecía.
Ya que el domicilio de la familia del menor está ubicado en límites con la vecina entidad de Puebla, la policía se demoró en llegar.
Una vez que las autoridades de Puebla turnaron el caso a Tlaxcala, personal del Departamento de Investigación para Personas Desaparecidas de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) se constituyó en el lugar para iniciar con la indagatoria.
En las primeras horas de este sábado, el progenitor reveló a la Policía de Investigación que había encontrado sin vida a su hijo sin ropa en el interior de una cisterna de una casa en construcción cercana a su domicilio.
Correspondió a personal de Bomberos de Tlaxcala extraer el cuerpo sin vida de quien en vida llevaba el nombre de Ángel N., de 12 años, alumno de primer año de secundaria.
La PGJE reveló que el menor salió de su casa al filo de las 20:00 horas, tiempo en el que se quitó el uniforme escolar y se metió al agua.
También confirmó que el cuerpo no presentaba huellas de violencia, por lo que ordenaron el traslado al Servicio Médico Forense para la práctica de la necropsia de ley.
Claudia N., madrasta de Ángel, explicó a este Diario que el incidente ocurrió cuando salió de su hogar para ayudar a su esposo porque se había descompuesto una motocicleta.
Expresó que procreó tres hijas con su esposo Ismael y que tanto Ángel como Ana, son sus hijastros.
Expuso que el niño antes de introducirse al agua se despidió de sus hermanitas, pero especialmente de Ana, le dijo: “pásatela bien en tu cumpleaños, ya no regresó a comer espagueti que la hermanita le había servido”. El próximo 11 de abril Ana, la hermana de Ángel, cumplirá 11 años de edad.
- En la colonia Santa Elena del barrio de San Bartolomé, la mayoría de la población asentada vive hacinada y entre la pobreza