Hacer justicia por mano propia en contra de presuntos delincuentes se ha convertido en Tlaxcala en una atrocidad cada vez más común.
El alza en los índices de inseguridad y la poca respuesta de corporaciones policiacas de los tres niveles de gobierno, provoca que algunos grupos de tlaxcaltecas desaten su ira en demanda de frenar todo tipo de actos ilícitos.
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Sin embargo, que oficiales capturen a un supuesto ladrón en flagrancia o con un señalamiento directo de su víctima, y que más tarde quede en libertad, se suma a las causas para que la sociedad demuestre un hartazgo social.
Para la organización civil “Causa en Común AC”, una atrocidad es el uso intencional de la fuerza física para causar muerte, laceración o maltrato extremo; así como la muerte de un alto número de personas; entre vulnerables, de interés político o provocar terror.
Lo anterior viene a colación por el incremento de intentos de linchamiento en la entidad, pues en menos de una semana se registraron ocho casos en diferentes municipios, donde uno de ellos sí se consumó en contra de un supuesto hampón del estado de Guerrero.
No obstante, un informe de enero a junio de 2021 hecho por la misma asociación indica que en Tlaxcala estos casos son más recurrentes, pues un promedio de 20 casos se han acumulado en este periodo, entre ellos, resaltan cuatro linchamientos concretados.
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El estudio de “Causa en Común” se basa en notas difundidas por medios periodísticos a nivel nacional, de ahí que apunta historias que, acumuladas, presentan un mosaico de dolor y crueldad, que se esconde detrás de las cifras de incidencia delictiva.
Muestra también que buena parte de estas atrocidades son perpetradas por personas que no forman parte de organizaciones criminales, pues igual se trata de violencia familiar, comunitaria y social.
Por su parte, la sociedad cuestionada por estos casos afirmó que amagar con el linchamiento de un ladrón tiene dos vertientes; la primera que entre los ladrones exista pánico para ya no delinquir y otra que las autoridades “se pongan a trabajar”.
Agregaron que también buscan cuidar el bienestar de su familia ante actos de asalto, robo o hasta secuestros, aunado a velar por su tranquilad y patrimonio familiar.
En contraparte, autoridades que han actuado para evitar un linchamiento, refirieron que en este tipo de casos no existe denuncia por parte de los pobladores, de ahí que la autoridad judicial no procede en su contra conforme a derecho.
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LAS ATROCIDADES
En menos de una semana en Tlaxcala hubo siete intentos de linchamiento y unos más se consumó, acumulando así las ocho “atrocidades”; todos han sido publicadas en la edición impresa de este Diario.
De manera detallada, estos casos se han presentado en los municipios:
- Xicohtzinco (2),
- Acatitla, Panotla (1),
- Fraccionamiento Jardines, Apizaco (1),
- Primera Sección de Xaloztoc (1),
- Huamantla (1),
- Totolac (1)
- Ixtacuixtla (1), éste último fue consumado.
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De manera total, la asociación civil registró en Tlaxcala 40 atrocidades, entre ellos hay casos de tortura, calcinamiento, esclavitud y trata, destrucción de cadáveres, asesinato de mujeres, fosas clandestinas, masacres, asesinatos de personas vulnerables, asesinato de niños y mutilación.
Del total de casos emitidos, la mitad los cubren los intentos de linchamiento y linchamiento de enero al mes de junio de 2021.
En lo que va del año han sido los intentos de linchamiento los más recurrentes, pues de los 165 documentados a nivel nacional, un promedio de 20 corresponden a Tlaxcala.
- Con información de Eduardo Tlachi | El Sol de Tlaxcala
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