Sonora.- A cuatro años del derrame de tóxicos de la mina Buenavista del Cobre en los ríos Bacanuchi y Sonora, los turistas del estado y foráneos acuden a los afluentes para disfrutar de las áreas verdes, así como del agua que recorre los más de 271 km del territorio sonorense.
Durante los primeros dos años después de la contingencia ambiental, el flujo de visitantes disminuyó en los ocho municipios afectados por la dispersión de 40 millones de litros de químicos provenientes de la mina de Grupo México ubicada en Cananea.
Ivonne Quintero Molina, guía de turistas y touroperadora en la zona del río Sonora, confirmó que esta región continúa siendo uno de los destinos más solicitados por los extranjeros.
Mencionó que el desastre ambiental de 2014 resultó desfavorecedor para la población, pero también fue una oportunidad para fortalecer sus productos y la capacitación en el aspecto turístico.
La guía de turistas compartió que los municipios con mayor demanda en la ruta del río Sonora son Banámichi, Aconchi y Ures, debido a los sitios turísticos que tienen como las Aguas Termales de Aconchi.