El embajador de los Estados Unidos en México, Ken Salazar, acudió a la Basílica de Guadalupe para sumarse a elevar en oración los nombres de los sacerdotes jesuitas asesinados en Cerocahui, municipio de Urique.
La oración fue para que la muerte de Javier Campos y Joaquín Mora no sean en vano, en la búsqueda de seguridad para la gente de ambos países, destacó el embajador en su cuenta de Twitter.
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“En el Santuario Nacional de México levantamos en oración los nombres de los dos sacerdotes jesuitas asesinados, los padres Javier Campos y Joaquín Mora, para que sus muertes no sean en vano en la búsqueda de seguridad para la gente de ambos países”, publicó.
En una fotografía que publicó en su Twitter este domingo se le observa con una rosa roja en la mano, acompañado de un sacerdote y dos personas más.
Fue el lunes 20 de junio, a las 18:00 horas, cuando la Fiscalia General del Estado confirmó el asesinato a tres personas en Cerocahui, los dos sacerdotes jesuitas y un guía de turistas.
Nota publicada originalmente en El Heraldo de Juárez